Coaching

No seas un #emprendedor de pijama

Artículo publicado el 16 de septiembre en el blog de Cink Emprende. 

2980384782_4524126fcb_z

Amigo Jorge,

En los casi 10 años que llevo asesorando, tutelando o mentorizando emprendedores hay un perfil que se repite con frecuencia, fácil de identificar y que lamentablemente (con algunas excepciones, claro está) no suele acabar llevando a buen puerto su proyecto empresarial: “el emprendedor de pijama”.

Y ¿cuál es el emprendedor de pijama? Con la cautela habitual con la que siempre hay que contar cuando intentamos definir a un colectivo, el emprendedor de pijama es aquella persona con una idea de negocio más o menos clara, con una dedicación al proyecto compartida o cuanto menos difusa, que pretende ir desarrollándola en sus ratos libres, siempre desde casa, y que suele salir de su cueva solo cuando se le presenta algún problema concreto (normalmente menor, aunque a él le suele suponer un mundo) o cuando recibe invitación a alguna formación o evento que ha entendido que podría ser de su interés. Con todo el cariño a los “emprendedores de pijama”, emprender es muy difícil, y cuando fallan las bases es complicado construir un proyecto robusto desde la “soledad” del hogar, dulce hogar.

 

Además de alertar de los riesgos que presenta un proyecto cuyo emprendedor no está dedicado al 100% a su proyecto (cuando su competencia sí lo está, que nadie se equivoque) en este post, busco poner en valor la importancia, casi crítica me atrevería a decir, de emprender acompañado. Y cuando hablo de emprender “en compañía” no me refiero literalmente a hacerlo junto a un socio o cofundador, lo hago especialmente para resaltar las ventajas de lanzar un proyecto empresarial rodeado de otros emprendedores, ya sea en algún espacio público o privado, pero nunca desde el domicilio, hábitat natural del “emprendedor de pijama”.

La oferta de espacios para emprendedores es enorme y tanto el sector público (a través de sus viveros de empresas, pre incubadoras o aceleradoras) como el privado con sus coworking o centros de empresas, ofrecen una amplia gama de posibilidades para acompañar al emprendedor durante sus primeros pasos.

Muchos estudiosos, tanto del fenómeno emprendedor como de distintas personalidades exitosas en distintas áreas (Napoleon Hill, Francisco Alcaide, etc), confirmado por mi experiencia personal trabajando “codo con codo” con miles de emprendedores, coincidimos en varias características (entre otras) que se podrían considerar propias del “emprendedor de éxito”: disciplina, método y foco.

Disciplina: emprender es muy duro y le exige al emprendedor el ser capaz de equilibrar eficazmente multitud de factores (conciliación de la vida personal, liderazgo, gestión de equipos, ventas, análisis de la competencia, relación con inversores, etc); solo las personas disciplinadas son capaces de gestionar infinidad de responsabilidades sin ser arrollados por las mismas.

Foco: en el magnífico libro “Aprendiendo de los mejores” uno de sus autores dice: “Si quieres ser un emprendedor exitoso, tienes que aprender a enfocarte. Esto simplemente significa seguir un curso de acción hasta tener éxito (FOCUS= Following One Course of action Until Successful). Esto lleva tiempo y esfuerzo, y fuerza de carácter.(…) Al final del día, la diferencia entre un emprendedor exitoso y aspirante a emprendedor es el Enfoque.” No puedo estar más de acuerdo, los emprendedores de éxito deciden a qué quieren dedicarse, cuál es su misión, y a ello dedican todo su esfuerzo y energía, y además, les facilita la toma de decisiones ya que solo tienen que responder a una pregunta: “¿esto me ayuda a acercarme a mi objetivo?”.

Método: Se suele decir “una meta sin un plan es solo un deseo” y que “los sueños no se hacen realidad, sino que los planes se hacen realidad”.  Para lograr las metas (FOCO) hay que hacer un planning para conseguirlas, tener DISCIPLINA para llevarlo a cabo y también demasiadas veces olvidado, tener un MÉTODO que te ayude a realizar y ejecutar exitosamente los planes. Los grandes emprendedores suelen ser personas muy curiosas, siempre ávidas de aprender y sobre todo de idear nuevos productos o servicios que satisfagan mejor a sus clientes, y todos siguen un MÉTODO efectivo para ello. Sin un MÉTODO, estamos abocados a ser ineficientes y poco competitivos.

 

Volviendo al “emprendedor de pijama”, ¿pensáis que el hogar dulce hogar es el lugar más adecuado para ser disciplinado, tener un método de trabajo y realizar las acciones con foco? Además de las innumerables tareas que una casa siempre exige y de las posibles interrupciones que en esta se producen (familia, peques, servicio del hogar, etc) explicarle a tu cerebro que el mismo espacio donde descansas, duermes, ves la TV, juegas con tus hijos, etc es el lugar donde tienes que sacar tu proyecto adelante, no es tan fácil. La DISCIPLINA, el FOCO y el MÉTODO requieren hábitos y el domicilio habitual, el cerebro lo identifica con familia y descanso, y requiere unas especiales condiciones (independencia, espacio, despacho, etc) para que también lo haga con trabajo.

Además de estas razones “cerebrales” y de “concentración”. El lanzar tu proyecto empresarial desde algún espacio compartido tiene innumerables ventajas:

  • Tener a mano a asesores o mentores que te podrían guíar o ayudar con tu proyecto.
  • Estar al día de los premios, ayudas o subvenciones
  • Acceso a distintas actividades formativas o de networking.
  • Conocer la experiencia en primera persona de emprendedores de éxito.
  • Contacto directo con personas de otros sectores y especialidades que te pueden echar una mano para cualquier duda concreta.
  • Compartir suministros (luz, agua, limpieza, etc) y servicios comunes (fotocopia, salas de reuniones, etc).
  • Y lo más importante, NO ESTARÁS SOLO. Tendrás gente al lado que te podrá animar o contar sus miserias, compartir un éxito o llorarte un fracaso; en resumen, saber que en la batalla de emprender, no estás solo, y que hay muchos más “locos” como tú, con sus penas y logros dispuestos a nadar contra corriente para hacer realidad su realidad empresarial. Nos guste o no, vivimos en una sociedad donde el emprendedor es la excepción, el “bicho raro” y el trabajar rodeado de “bichos raros” como tú, a todos nos gusta.

Expertos de RRHHs han demostrado que para determinados puestos y perfiles, el teletrabajo no solo merma la productividad, sino que puede llegar a aumentarla por la mayor satisfacción del trabajador que no debe desplazarse a la oficina, el ahorro de tiempo de transporte y por la no exigencia de tener contacto “físico” con el resto del equipo. Esto es así, siempre y cuando el trabajador realice unas funciones concretas y específicas, fácilmente medibles en remoto, y unas condiciones adecuadas en su domicilio para desempeñar el trabajo con la tranquilidad adecuada.

Sin embargo esto no sucede en el caso del emprendedor, quien tiene unas funciones, de todo tipo, menos concretas o específicas. El emprendedor debe negociar con un inversor, hablar con un abogado, venderle a un cliente, tramitar impuestos con el gestor, hablar de financiación con un banco, seguir el dashboard de métricas… amén de digerir el mal trago de ese cliente que te cierra un contrato cuando ya pensabas que estaba hecho, un proveedor que te dice que se va a retrasar en la entrega o esa transferencia que no te llega y tienes que pagar el recibo de la hipoteca. Para manejar y superar todas estas situaciones, nada mejor que estar acompañado, tener alguien a quien consultarle o simplemente en quien apoyarse o “contarle” sus penas para desahogarse. No hay nada que mate más el espíritu emprendedor que la sensación de soledad.

Para aquellos emprendedores a los que les encantaría lanzar su proyecto “acompañados” pero consideran que no se pueden permitir el coste de una mesa en un coworking, el sector público (e incluso el académico ) ofrece diversas iniciativas completamente gratuitas como las preincubadoras, aceleradoras, coworkings, city labs, etc donde durante un período de tiempo (entre 3-12 meses habitualmente) además de asesoramiento, tutelaje y formación, se ofrece un espacio de trabajo para que el emprendedor pueda lanzar su proyecto, e incluso crear allí mismo su empresa o darse de alta como autónomo. Dicho esto la oferta privada de espacios de coworking es amplísima y por cantidades muy razonables entre 50-150€/mes un emprendedor puede disponer de un espacio entre otros emprendedores.

Por tanto, si vas a emprender  y quieres tener éxito por favor “no seas emprendedor de pijama” y no lo dudes, acompañado seguro que llegarás más lejos.

Un abrazo

Emilio

PD. Si tienes una idea empresarial, no quieres ser un “emprendedor de pijama” y no sabes a dónde acudir, en Cink Emprende podemos ayudarte, tanto desde nuestro centro para emprendedores en el centro de Madrid, como informándote de las distintas iniciativas públicas que gestionamos (Viveros de Empresas, City Labs, Aceleradoras, Pre incubadoras, etc) y que podrían ser de tu interés.

PD.2 Fotografía cortesía de Alexandre Normand

7 enseñanzas de un personaje de leyenda

Amigo Jorge,

Juan Belmonte Matador de Toros

Juan Belmonte Matador de Toros

No es mi intención en absoluto hacer una apología de la tauromaquia con este post, lejos de mí. Pero cayó en mis manos gracias al genial arquitecto y mejor amigo @CurroPoza una biografía deliciosa, que se lee como una novela y que es capaz de hacerte reír sin parar o de dejarte sin habla de pena; me refiero a la Biografía de Juan Belmonte escrita por el injustamente olvidado Manuel Chaves Nogales (y cuya obra los amigos de Libros.com están consiguiendo recuperar).

Independientemente de que seas o no aficionado al toreo,  la realidad es que Juan Belmonte es uno de esos personajes de leyenda, un mito capaz de innovar de tal manera en su campo, que cambia para siempre el devenir de una actividad, en este caso, la tauromaquia.

Auténtico revolucionario de este «arte» sin lugar a dudas, todos los especialistas coinciden en que hubo un antes y un después de él. Salvando las diferencias de actividad Juan Belmonte podría ser al toreo lo que Dick Fosbury al salto de altura o Picasso a la pintura, por hacer algunas analogías en áreas más conocidas. En  la biografía, altamente recomendable se sea aficionado al toreo o no, se narra maravillosamente la infancia, juventud y madurez del torero; su aprendizaje, su ascensión, sus hazañas y su confirmación como personaje de leyenda.

Lecciones del éxito

De la lectura de sus páginas, se pueden extraer varias lecciones magníficas, y perfectamente aplicables hoy día a cualquiera de nosotros, que explican cómo un chiquillo de un barrio sevillano, hijo de un paupérrimo vendedor de quincalla sin ningún pedigrí ni contacto con el mundo del toreo, se llegó a convertir en el torero más famoso de la historia (llegó a ser portada de la revista TIME):

1) Sus circunstancias marcan su vida. Una versión trianera y taurina del «connecting the dots» de Steve Jobs. Sin ninguna tradición taurina ni presupuesto para financiar su formación. Belmonte hubo de aprender a torear a escondidas, colándose en tentaderos, y por supuesto, de noche para no ser descubierto. Gracias a estas ilegales capeas nocturnas, en las que la visibilidad lógicamente era nula, acabó Belmonte forjando un estilo transgresor, único en los ruedos hasta la fecha, en el que toreaba con los pies quietos delante del toro, con capotazo en el último momento. Revolucionó el toreo para siempre, pero no porque quisiera ser más valiente que otros, sino porque de noche no había otra forma de torear al toro!! «Ninguna cosa importante puede tener un origen arbitrario, y si yo toreaba como lo hacía era porque en el campo y de noche, había que torear así». Ya lo decía Steve Jobs: «no puedes conectar los puntos hacia adelante, sólo puedes hacerlo hacia atrás. Así que tenéis que confiar en que los puntos se conectarán alguna vez en el futuro.»

2) Aprovechamiento al máximo de las oportunidades: literalmente daba la vida cuando tenía una oportunidad. Recordaba a la genial frase de Shankly «Algunos creen que el fútbol es solo una cuestión de vida o muerte, pero es algo mucho más importante que eso«. En un célebre pasaje de su biografía, tras varias malas corridas en Sevilla al principio de su carrera debido a las malas noches que le daba su enamorada de entonces, Belmonte cayó en desgracia, nadie le llamaba, era invisible… Por una baja de última hora le llamaron para torear en Valencia, pidió prestado un traje de luces y en el autobús se conjuró consigo mismo: o moría o salía a hombros. Huelga decir que no murió, estuvo a punto, pero recuperó su prestigio perdido.

3) Trabajo, trabajo y trabajo. Innumerables las corridas que realizaba, por toda España, a principios de siglo, viajando en coche, tren, autobús… y en una época en la que apenas había hospitales, por lo que sus «heridas de toreo» debían de sanar mientras seguía toreando.

4) Networking al más alto nivel. Elevando su oficio a la categoría de arte, se juntó con los mayores intelectuales de la época. Tuvo la «visión» de ser considerado un artista, al igual que los pintores y escritores, lo que le abrió infinitas puertas de negocios y de popularidad.

5) En el éxito no olvidar las raíces. Cada vez que volvía a su Triana nata, tras varios meses de éxitos por el mundo, en su barrio su gente le seguía tratando como Juanito el de toda la vida, no como un semidiós. Esto le marcó profundamente a Belmonte: por mucha fama que adquieras, por muchos éxitos que coseches, no dejas de ser humano y tu familia y tus amigos de toda la vida son quienes mejor te lo recuerdan.

6) Hábil en el manejo clientelar como personaje público. Divertidísimo sus requiebros fuera de la plaza para satisfacer, agradar y no enfadar a todo la red de personajillos que le rodeaban a cada paso: políticos, hombres de negocios, aficionados, mujeres… manejar la fama no es cosa fácil, y aún más, mantener equilibrados a todos los que quieren estar a tu lado, sin enfadar a otros. Belmonte, manejó estos gajes de la fama con la misma maestría que al toro en la plaza.

7) Auténtica pasión por lo que hacía. De otro modo sería imposible mantener el ritmo de trabajo que se impuso, ni mucho menos llegar a emocionar al público. Si algo destacaba a Belmonte, era un profundo amor por su profesión.

Cómo ser un mito

Consejos absolutamente de actualidad, válidos para cualquier persona, emprendedora o por cuenta ajena. Para mí tienen gran valor ya que fueron estas enseñanzas las que consiguieron convertir a un pobre muchacho de Sevilla, en el mayor torero de todos los tiempos.

Y desde luego uno no llega a ser un mito, fruto de la casualidad.

Un abrazo

Emilio

PD. Gracias a D. Curro por regalarme libros tan maravillosos

3 enseñanzas para #emprendedores del deportista de élite

Amigo Jorge,

Es habitual hablar de las similitudes existentes entre el deportista de élite y el emprendedor. No es mi intención incidir en cualidades más o menos evidentes del deportista que también el emprendedor debe hacer gala, como la necesidad de entrenar duro, preparación mental, tomar decisiones rápidas bajo presión, liderazgo, gestión de equipos, motivación, etc.

Triatlon_GomezNoya

   «A veces se gana y a veces se aprende»

Aparte de todas estas, relativamente obvias y comunes a cualquier actividad, a mi juicio hay 3 enseñanzas claves, propias del deportista de élite que son de total vigencia para el emprendedor y que van más allá del esfuerzo y el trabajo duro:

1) Aprender a convivir con el fracaso. Absolutamente crítico reconciliarse con la posibilidad de perder (no ganar) y no hundirte. En el deporte, lo normal es fracasar, si así entendemos el «no ganar»; ganar es un accidente y la excepción, siendo la derrota lo habitual y común. Muchos compiten pero solo uno gana, da igual la especialidad. El convivir con la derrota y seguir entrenando duro para la siguiente ocasión es uno de los factores críticos de éxito de todo deportista de élite. Aceptarlo como natural, aprender de la experiencia y convertirlo en un aprendizaje vía fracaso, es propio del gran deportista, que siempre y sin excepción empezó perdiendo y, por tanto, «fracasando».

También para el emprendedor, especialmente en sus comienzos, esta acumulación de «NOes» o fracasos es la tónica habitual: hablar con miles de posibles clientes, inversores, etc y que solo 2/3 respondan afirmativamente. El aceptar varios NOes consecutivos sin desfallecer, aprendiendo de cada «fracaso» será clave para su futuro éxito empresarial. El empresario y prolífico inventor Thomas Alva Edison tenía mucha razón «No fracasé, sólo descubrí 999 maneras de como no hacer una bombilla». De esta realidad se deriva el siguiente factor de éxito.

«No fracasé, sólo descubrí 999 maneras de como no hacer una bombilla»

2) Convencimiento que el éxito es relativo y que siempre depende de uno mismo. El deportista de élite sabe que la competencia es feroz y que siempre habrá otro mejor que él, por lo que debe centrarse en dar lo mejor de sus capacidades y, con esta filosofía, los éxitos acabarán viniendo. Para el deportista de élite el éxito o el fracaso no está en ganar o no ganar, como lo considera el público, sino en comparar su rendimiento respecto a su capacidad y talento. Del mismo modo el emprendedor debe reconocer que encontrará competidores con mejor equipo, más financiación, poderosos contactos, mayores clientes, menor precio… por lo que al final sus opciones de éxito dependerán de su implicación, dedicación y actitud. Si das lo mejor de ti mismo, lo normal es que acabes triunfando y completamente realizado personalmente como emprendedor, aunque esto no implique ser el líder del mercado o «ganar» siempre.

Nadie mejor que el para mí mejor deportista español de la historia, Rafa Nadal, para enseñar esta maravillosa lección emprendedora. En esta entrevista de finales de 2012, en los mins. 16-24 , el campeón español explica cómo él es el único de su entorno que se muestra tranquilo y satisfecho tras una dolorosísima derrota frente a su gran rival Nole Djokovic en el Open de Australia 2012, después de 6 horas de partido. «Estoy contento de mi mentalidad, sé que he competido».

Pese a perder, Nadal terminó sabiendo que había obligado al rival a ir al límite y tuvo la conciencia de que compitiendo de esta forma en la siguiente ocasión él ganaría, como efectivamente pasó. Delicioso y revelador el análisis que de la cabeza de Rafael Nadal hace el periodista británico John Carlin.  Ser consciente de que el éxito depende en última instancia de nosotros, independientemente de un resultado de victoria o derrota puntual, hace mejores a los deportistas y, por supuesto, a los emprendedores. 

«No hay buen viento para quien no sabe a donde va»

3) Ten un plan siempre a 4 años vista, como en los JJOOs. El deportista de élite siempre maneja planes a c/p, m/p y l/p. Todos los deportistas, especialmente los olímpicos, manejan objetivos a 4 años, con diversos hitos entre medias. Esto es práctica habitual del deportista de élite, que meticulosamente planifica su calendario, para llegar en plena forma al objetivo principal, llámese JJOOs, Mundial, el Tour, Roland Garros, etc. «No hay buen viento para quien no sabe a donde va» y la falta de visión a l/p y de foco o de objetivos a m/p y l/p suele ser uno de los problemas típicos del emprendedor.

Si vas a emprender hay mucho que aprender del entorno del deporte, así que practícalo, aprende y emprende! ;)

Un abrazo.

Emilio

PD. Debo dar las gracias a dos personas por su crítica contribución a este post:

– A Kike Sarasola, exdeportista de élite (3 veces diploma olímpico, 4 veces campeón de España y bronce europeo como jinete) y actual emprendedor de éxito (fundador de Room Mate Hotels), por amablemente responder a mi pregunta (1h13 min.) sobre qué características como deportista le habían ayudado más en su actual faceta de emprendedor.

– A África Martín, coach de deportistas y de emprendedores, por enseñarnos las técnicas que los deportistas de alto nivel utilizan para mejorar su rendimiento.

Y también a Adolf Boluda, por la foto de Gómez Noya.

El milagro de los panes y las startups

Amigo Jorge,

StartupNationSi hay un país del que se puede hablar de un milagro económico sin grandes tapujos ese es Israel. Con solo 7,1 millones de habitantes, apenas 60 años de vida, sin recursos naturales, y en un constante estado de guerra al estar rodeado de países cuanto menos no-amigos, es capaz de  generar startups de éxito como Jaén produce aceite, y ha situado más empresas en el NASDAQ neoyorquino que ningún otro país a excepción de EEUU.

Mucho se ha hablado de este milagro israelí, y en ningún lugar se explican mejor las razones de este éxito que en el formidable superventas «Startup Nation» de Saul Singer y Dan Senor. Auténtico libro de cabecera para todo especialista en desarrollo económico o estudioso del emprendimiento y la innovación.

No es mi intención resumir el libro, ni hacer una enésima reflexión sobre él, ya que nunca podría sustituir al aprendizaje derivado de su lectura (lo recomiendo), pero sí señalar a mi juicio las motivaciones fundamentales de este éxito, y alguna reflexión al respecto sobre cómo aplicar su éxito a España, que es lo que nos importa, 0 donde sea.

1) Entorno, entorno y entorno.

Tras 7 años trabajando día a día con emprendedores tengo clarísimo que el emprendedor ni nace ni se hace, se contagia; y al igual que Brasil saca futbolistas, Irlanda  músicos o Jerez, cantaores de flamenco, pues Israel genera startups, simple.

En Israel se ha creado un auténtico y genuino entorno entrepreneur-friendly en el que poder ser emprendedor, es una opción de vida loable y reconocida, donde la sociedad israelí valora notablemente el trabajo de sus emprendedores, no penaliza el presumible fracaso de muchas de las empresas y se dan facilidades para que los jóvenes quieran llevar a cabo sus proyectos.  Jutzpah es el término local que define este espíritu osado, descaro o afán por el riesgo que caracteriza a los israelíes.

2) Abundante disponibilidad de financiación para inversión en startups.

El más importante granito de arena que a mi juicio pone la sociedad israelí, no es solo considerar a los emprendedores héroes (al igual que aquí hacemos con los futbolistas o los toreros) sino que además hay una conciencia colectiva de la importancia de la financiación para poder lanzar startups de éxito.

El Gobierno ha impulsado la creación de varios fondos atrayendo a grandes inversores a los mismos. Sus frutos son una inversión per cápita en startups es de 140$ por habitante, mientras que en EEUU es 70 o en España 1. Aquí el amigo Javier Megías explica muy bien el origen de esta abundancia de Capital Riesgo en Israel.

3) Generosa política inmigratoria.

«Los inmigrantes no son reticentes a emprender. Ellos son, por definición, personas arriesgadas. Una nación de inmigrantes es una nación de emprendedores» Con esta memorable frase de Gidi Grinstein empieza el capítulo del libro Startup Nation dedicado a la inmigración. Gracias a una abierta política migratoria Israel durante los 90 recibió varios cientos de miles de inmigrantes judíos procedentes del bloque soviético, la mayoría gente muy formada y preparada.

4) Obligatoriedad y alta exigencia del servicio militar. 

Algo genuinamente israelí, y que a la postre dota a los jóvenes israelíes de unas skills, unos conocimientos tecnológicos y de una capacidad para tomar decisiones claves en décimas de segundo, únicas en el mundo.

Además, une a promociones enteras de jóvenes israelitas en situaciones de máxima tensión con vistas siempre en un bien superior, lo que les crea unos lazos personales irreductibles, genera un networking único y les hace aprender a trabajar colectivamente en torno a un compromiso común, filosofía que mantendrán en el futuro a la hora de sacar adelante empresas. No solo crean grandes startups por su propio beneficio, sino por el de sus clientes, sus compatriotas y su país en un entorno colaborativo donde cada individuo tiene claro el objetivo final y goza de autonomía suficiente para realizar cualquier paso hacia el mismo.

El libro explica perfectamente el altísimo nivel técnico y formativo que los jóvenes israelíes reciben durante su instrucción militar, en donde se les enseña a sobrevivir en un entorno sin jerarquías y a improvisar en situaciones críticas,  lo que será una experiencia y modus operandi clave en su posterior éxito como emprendedores.

5) Talento bien organizado y preparado.

Israel cuenta con 4 Universidades entre las mejores del mundo, varias de ellas incluso anteriores al estado de Israel y de sus aulas han salido varios genios como Einstein o Freud y multitud de premios Nobel. Gracias a esto a y a la inmigración Israel cuenta con más ingenieros y científicos per cápita que ningún otro país en el mundo y más paper científicios per cápita que ningún otra nación (109/10.000).

6) Mentalidad muy internacional desde el minuto 1, con gran foco en EEUU.

Al tener un mercado «pequeño» y estar rodeado de estados no-amigos en Israel a las empresas no les queda otra que mirar al exterior, donde su «diáspora» hace un papel crucial. Son millones los israelíes con puestos de responsabilidad por el mundo, especialmente en EEUU, que actúan de perfectos cicerones de las empresas israelíes.

7) Necesidad de autosuficiencia industrial y tecnológica.

La conflictiva situación geográfica de Israel, y la actitud cambiante de varios de sus países aliados  les obligó a desarrollar una moderna industria militar y a apostar por el I+D y por la tecnología propia como piezas básicas para su defensa. Este hecho trajo como consecuencia una amplia disponibilidad de ingenieros y tecnólogos para las startups.

Hay más, pero éstas son a mi juicio las más relevantes.

A modo de conclusión, y con lo que me quedo, es que Israel demuestra que si hay talento, la necesidad agudiza el ingenio. Es cierto que en España no estamos rodeados de países enemigos, ni estamos en permanente estado de guerra, ni tenemos día sí y día también amenazas terroristas en nuestro territorio. Pero sí tenemos un paro del 30%, y por encima del 50% juvenil, un elevado % de población en el umbral de la pobreza, escándalos de corrupción, sensación de impunidad, afectados por la hipoteca, manifestaciones en la calle…

Desde luego España está en una situación de emergencia máxima, lo que debe servir de acicate y despertar el talento patrio, que lo hay y mucho, a lo Rafa Nadal, para mí el mejor epítome de lo que puede y debe ser España ahora: tras un período renqueante, tocado por las lesiones, se ha adaptado a la nueva situación, conoce sus limitaciones, se ha adaptado a ellas y vuelve a las pistas aún más fuerte y completo que antes.

Pues hagamos lo mismo y regresemos como él. Esta España sombría del 30% de paro y de la corrupción también es la España del récord mundial de trasplantes y donación de órganos , la España del líder mundial de contenidos para móvil (ZED), de la mayor red mundial wifi (FON) o Softonic, la España de Inditex, la España del AVE a la Meca o de la ampliación del canal de Suez, la España de El Bulli o de El Celler de Can Roca (mejor restaurante del mundo), la España del mejor vino del mundo, la España líder mundial en grafeno o la España de Rafa Nadal… El video que incluyo en el post de Grant Thornton lo expone inmejorablemente. Quitando un poco los skills aprendidos en el servicio militar israelí, el resto son características propias de entornos innovadores, no imposibles de conseguir ni mucho menos en España, sino alcanzables, obviamente dentro de nuestra idiosincrasia. Tenemos que creérnoslo. 

RafaelNadalSe están dando pasos en el camino seguido por Israel: fondos público-privados para startups (Spain Startup Coinvestment Fund de ENISA, Madrid Emprende Seed Capital, Isabel La Católica), mentalidad más internacional (balanza comercial positiva por 1ª vez en la historia), entorno más pro-emprendedores, talento bien organizado y preparado… y eso siempre es positivo.

Empecemos desde ya, como granito de arena para hacer un entorno un poco más entrepreneur-friendly hoy yo escribo este post, todo suma. Qué vas a hacer tu?

Espero que te guste.

Abrazos

Emilio

PD. Gracias a mirsasha por la foto de Rafa Nadal

Ideas del método #annoyomics para un emprendedor

Amigo Jorge,

En Navidades me regalaron el libro «#Annoyomics El arte de molestar para ganar dinero» de Risto Mejide y su rapidísima lectura me ha animado a escribir este post. El autor, emprendedor además de publicista, conferenciante, crítico musical y otras funciones, demuestra saber algo de marketing, manteniendo al lector siempre en vilo. Estructurado en capítulos cortos, alterna ejemplos de «molestias» exitosas, junto con su visión de su historia como jurado en Operación Triunfo, programa televisivo que le disparó a la fama. Engancha de tal forma que sin ánimo de parafrasear a Jordi Sevilla «se lee en dos tardes».

Siendo la compra y posterior lectura la opción preferida por el autor, el amigo Yoriento, te lo resume en 2 palabras en un post.

A mi juicio el libro es entretenido, se puede estar de acuerdo con la propuesta de «método» o no, y podrá gustar más o menos la imagen (siempre polémica) del escritor, pero la realidad es que se incluyen un buen puñado de casos reales de publicidad exitosa basada en la molestia, se subraya la importancia del social media en este sentido y da buenas pistas sobre cómo una pyme o un proyecto emprendedor puede destacarse en un mundo hipercompetitivo como es el actual y en el que la publicidad la copan las grandes marcas.

No obstante, las pymes, los emprendedores y todos los que quieran hacer marca personal están de enhorabuena,  Internet ha cambiado el paradigma de la relación marca-consumidor y ya no se llega a éstos solo por los medios de comunicación tradicionales, quienes filtraban todos los contenidos previo pago normalmente, sino que ahora cada persona, cada marca, cada proyecto ya es en sí mismo un medio, por lo que con una buena (y «molesta») estrategia cualquier emprendedor puede destacarse, sobresalir y, lo más importante, ganar dinero.

Y es precisamente en este hecho donde nace mi inspiración para el post, en intentar aplicar el método del autor (muy versátil, válido para marcas, proyectos o personas) al mundo del emprendedor en el que trabajo, superresumiendo el libro en 3 planteamientos o pistas que todo emprendedor puede hacer para diferenciarse, para hacerse notar, para llegar a más público y en resumen, para vender más.

Busca aquello que te hace diferente, único. El autor insiste en que no se debe buscar aquello que te hace especial sino en lo que eres raro. Aplicado al objetivo del post, es aquella característica que tienes tu como emprendedor, o tu equipo, que os hace absolutamente diferenciales, que nadie nunca os podría copiar (al menos no fácilmente) y en la que además podríais incidir permanentemente en vuestras comunicaciones ya que es obvio que tenéis (y de forma única) esa peculiaridad. Si además esta característica es capaz de polarizar y conseguir que automáticamente alguien se posicione, a favor o en contra, pues mejor (en esto insiste bastante Risto Mejide). Sobre esta particularidad única pivota permanentemente tu política de comunicación, tus intervenciones públicas y tus presentaciones. Ejemplo rápido y tonto, en mi caso personal podría decir que escribo los posts largos y barrocos, que digo con 16 palabras lo que podría decir en 6, sé que no gustara a todos, pero al menos esta «rareza» sin duda me define y a ti, que me lees, espero que te guste, jeje. Si no encuentras tu rareza el amigo Risto Mejide también te ayuda a encontrarla, y si ni por esas, pues te la inventas! 😉

Ten un «adversario» contra el que poder arremeter o al que poder combatir en tus acciones de comunicación. Cuanto más grande e inalcanzable, mejor. Puede ser una compañía, una marca o simplemente un concepto. Si tienes un Goliat contra el que luchar en tu sector, conviértete en su adversario, sé el David que con tu pequeña onda con piedrecitas amenazas con tumbarle. Si no lo tienes, busca los valores que representa  o defiende tu mayor competidor y combátelos. Y si no los encuentras, que tu enemigo sea la enfermedad social para la que tu empresa será la medicina, el dolor que tus servicios van a calmar, o la frustración que vas a combatir: ese será tu enemigo. Y lo dicho, cuanto más grande sea esta frustración que tu empresa cura o cuantos más adeptos puedas polarizar a tu favor en esta cruzada, pues mejor. Por ej. Si tienes una empresa de moda sostenible o ética, que vendes productos hechos a mano siguiendo unos parámetros de ecología, ética y fabricación responsable, tus enemigos bien podrían ser las grandes marcas de tu sector de producción automatizada (todas o alguna en concreto) o en su defecto, la explotación a la que someten a sus  trabajadores en sus lugares de producción o incluso la vida actual que nos lleva a consumir este tipo de productos. Con este «gran enemigo» tienes para varias campañas de comunicación «molestas» para esas grandes marcas, con fotos de niños trabajando o de fábricas en condiciones infrahumanas, etc.

Marketing Guerrilla en la que quede claro qué posición defiendes y hazte oír. Internet ha hecho más fácil que nunca el poder conocer e interactuar con tus seguidores o con tus detractores. Qué hacer aquí? Basándote en lo antes mencionado (tu característica genuina y tu adversario) hay miles de acciones que poner en marcha en las  que solo tu ingenio, tu capacidad y tus ganas de «molestar» pondrán el límite: escribe posts simpáticos en donde atices (con respeto siempre) a tu enemigo, trabaja el «link bait» aunque sea malo (y le moleste al bueno de David Bonilla), trollea un poco en twitter y facebook tanto a tus adversarios directos como a sus seguidores, intenta hacer un viral ridiculizándoles con humor, promociona tu producto de forma original justamente en la puerta de un evento o feria a donde acuden los clientes de tu adversario, participa de ponente en miles de eventos defendiendo tus tesis belicosas  y atizando a tu adversario y di cosas sorprendentes e imprevisibles… Obviamente siempre desde el respeto, con un espíritu constructivo y basado en la sana competencia. Y si es con humor pues mejor, hay infinidad de opciones. Además las técnicas de marketing guerrilla siempre conviene utilizarlas cuando empiezas, ya sea con medios  molestos o no. En internet hay muchísimos blogs de los que coger ideas. 

El autor deja clarísimo en el libro que cuando habla de molestar, se refiere a «molestar bien» y lo define del siguiente modo: «Cualquier acción premeditada que busca venderle algo a alguien mediante la provocación de algún tipo de incomodidad».

A mi entender no es un método ni para todos los emprendedores, ni para todos los proyectos, ya que los que lo lleven a cabo sin duda tendrán que sentirse cómodos con el mismo. Lo que desde luego es innegable es que su puesta en práctica, más fácil que nunca dado al cambio de paradigma de la comunicación producido por internet, si se hace con éxito, permite diferenciarte por pequeño que seas en un entorno competitivo de una forma rápida y barata, vender más y al final, ganar más dinero. Algo inalcanzable hace unos pocos años.

El propio Risto Mejide,  y sobre todo su «marca personal» es un caso de éxito rotundo de su método, como bien recalca en el libro.

Entonces… a quién vas a molestar hoy? 😉

Un abrazo.

Emilio

PD. Qué mejor que una campaña «molesta», exitosa y reciente para ir encabezando este post. Aquí link al video completo por si no lo hubieras podido ver arriba o no te apareciera. Los amigos de Idealista con su anuncio de «pilladas» lo bordaron el verano pasado. Como explica su Cofundador y CEO Jesús Encinar la campaña fue un rotundo éxito.  Desconozco por completo si esta campaña fue llevada a cabo por la agencia de Risto Mejide o no, pero la realidad es que cuanto leí Annoyomics me vino a la mente este anuncio. Espero que os guste! 🙂

El caso de éxito como germen de un «ecosistema» emprendedor

Amigo Jorge,

Al multiemprendedor Iñaki Arrola le he escuchado en varias  de sus charlas mencionar la frase, atribuida a Marta Esteve: «El emprendedor ni nace ni se hace, sino que se contagia». Independientemente de la titularidad original de la frase, la realidad es que tras haber hablado, entrevistado y escuchado la historia y las motivaciones de cientos de emprendedores, no puedo estar más de acuerdo con Iñaki y con ella. Tiene todo el sentido, si es una obviedad que alguien no puede querer lo que no conoce, para querer ser emprendedor, cuantos más emprendedores te rodeen pues mejor, más conocerás lo que éstos sienten y padecen, más sabrás de las motivaciones que les hace empezar empresas y más posibilidades habrá de que te pique el gusanillo y te animes a vivir sin jefe.

Y algo tan sencillo como esto justifica en infinidad de ocasiones que existan ciudades o regiones con muchos emprendedores, y al contrario, localidades o comarcas con muy pocos.

He asistido a infinidad de eventos en los que, especialmente cuando había algún responsable público o relevante en el mundo del emprendimiento como invitado, siempre surgía la «pregunta del millón» en diversas modalidades y formas, alguna muy literaria (¿cómo se puede crear un genuino ecosistema emprendedor?), ora de forma más llana (¿cómo hacer que haya más emprendedores?) o la más de moda actualmente en España (¿cómo se puede replicar a Silicon Valley aquí?).

He escuchado respuestas de todo tipo, todas igual de acertadas y erróneas ya que no hay una receta mágica para convertir a una ciudad cualquiera de España en la San Francisco de Europa y, confieso que de todas, mi favorita es la que siempre daba el anterior Director Adjunto de Madrid Emprende y que intentaré reproducir.

Como toda buena respuesta,  más que ser una explicación científica o una enumeración de interminables de razones más o menos certeras, es una historia real, contada a modo de fábula, en la que Pachi (así se llama) recordaba al pueblo de su madre durante su juventud. Éste, un pequeño pueblo de interior de Navarra, tenía censados unos 2500 habitantes entonces, cantidad que se duplicaba cada día, ya que a él venían gentes de todos los pueblos de alrededor a trabajar en las empresas de este pequeño pueblo.

Este hecho le llamó la atención, y le hizo investigar el motivo de esta llegada masiva de trabajadores día tras día de la comarca a este pueblo, de interior, pequeño y alejado de cualquier gran urbe. ¿qué ha pasado aquí para que vengan tantos trabajadores? o formulado de otra forma, ¿por qué hay aquí tantas empresas?

Y el origen de la respuesta hay que buscarla en el buen hacer de un emprendedor que en los años 40 tenía un pequeño taller de fabricación de máquinas relacionadas con la agricultura. Este taller fue creciendo década tras década, para convertirse en grupo empresarial primero, en líder nacional después, adelantando a fabricantes ingleses y alemanes, a cotizar en Bolsa y finalmente a ser el líder europeo en un segmento concreto (sistema de pago de vending). Siempre con fábricas y por supuesto sede en este pequeño pueblo navarro, en la actualidad ya de 6.000 habitantes.

Pero lo que más le sorprendía a Pachi, era que esta venida diaria de trabajadores no era producida únicamente por la frenética actividad de esta pequeña empresa convertida en grande, al contrario, era o por el sinfín de comercios y empresas, lanzadas por emprendedores locales que, a la luz del crecimiento de esta gran empresa, fueron surgiendo bien para prestarla servicios, bien para responder a las necesidades de sus trabajadores o simplemente por efecto contagio de este enorme caso de éxito local y del posterior boom emprendedor. Es más, se da la paradoja que también en este pequeño pueblo surge en los 70 el principal competidor de esta gran empresa en su sector, al más puro estilo spin-off universitario ya que fue fundada por un ex-empleado. En la actualidad, los dos campeones nacionales de este sector, el de las máquinas expendedoras, tienen sede y fábrica en este pequeño pueblo de Navarra (¡de solo 6.000 habitantes! increíble, no?).

Lo que más me gusta de la historia, es que desde que la conozco y coincido con algún navarro, saco el tema y pregunto acerca de la veracidad o no de la misma, y de la existencia o no de esta pequeña «aldea de emprendedores» y la respuesta que me dan siempre es la misma: «sí, ese pequeño pueblo es muy conocido por la cantidad de negocios que allí hay». Casualidad o no, en cualquier creo que la historia es bonita, didáctica y muy gráfica a la hora de explicar el porqué un pequeño pueblo de interior se convierte en un relevante semillero de empresas, varias de importancia internacional.

Quizás de una forma más sencilla de ver y llevado al terreno deportivo, si hoy día tenemos grandes tenistas como Rafa Nadal, sin duda es porque hubo un pionero como Santana en los 60,  si hoy existe un Contador es fruto de un Bahamontes en los 50 y si tenemos un Lorenzo o un Pedrosa (además de un sinfín de nombres intermedios en todos los casos) es porque en su día hubo un Ángel Nieto.

En resumen y para no aburrir más, uno no puede querer y ambicionar lo que no conoce, por lo que no hay mejor receta para «impulsar» a nuevos emprendedores que el poder conocer y escuchar a otros emprendedores de éxito. Desnudar de los habituales atributos negativos que llevan aparejados los empresarios (explotador, usurero, ruín, capitalista, estafador, contrabandista, mafioso, etc especialmente a aquellos fundadores de sus empresas) es un ejercicio sano y positivo, ya que pone en valor el mucho esfuerzo que han dedicado para sacar su empresa adelante, el enorme mérito y sufrimiento para lograr el éxito, las gigantescas dificultades siempre existentes en los comienzos y, en último lugar, los efectos positivos en términos de empleo, riqueza, conocimiento y desarrollo económico para la localidad y región en la que han creado y hecho crecer su empresa.

Por si no la conocías y te apetece investigar un poco más acerca de esta historia, el pequeño pueblo navarro es Peralta, el diminuto taller convertido en líder europeo es Azkoyen y su principal competidor creada por un antiguo empleado (eso sí, tras la muerte del fundador de Azkoyen, Luis Troyas Osés) es Jofemar, ambas empresas, por supuesto, siempre dirigidas desde Peralta.

Espero que la historia te haya gustado y enseñado tanto como a mí! 😉

Un abrazo.

Emilio

Pd. Qué mejor imagen para señalar a este «pueblo de los emprendedores» que la legendaria aldea de Astérix, no? Lejos de mí el sugerir que esté rodeada de enemigos, solo reflejar ese carácter «heroico» de un pueblo tan emprendedor.

Aprendiendo management con los prusianos

Amigo Jorge,

Siempre me gustaron las revistas corporativas que te ofrecen las aerolíneas (las que lo ofrecen, claro está, que cada vez son menos). En mi opinión, quizás porque es lo que tienes delante una vez en el asiento y mi nivel de exigencia es mínimo, o porque al estar destinado a un público viajero siempre muestran lo mejor de los destinos a los que vuelan (estupendos restaurantes, hoteles de ensueño, los clubs más chics del lugar), pero la realidad es que me transmiten siempre «sentimiento positivo», una especie de «kharma» que te ayuda a afrontar con más ilusión la incomodidad inherente al estar en un vuelo.

Pues bien, en la versión de diciembre de BA me encontré por casualidad con este artículo dedicado a las técnicas de management surgidas dentro de la armada prusiana en el S. XIX, el cual me pareció de gran interés, especialmente al transmitir enseñanzas o principios que, como tantos otros, son de rabiosa actualidad y aplicación al mundo de la empresa en el S. XXI.

En esencia, el artículo enseña cómo los prusianos perfeccionaron una fórmula de dirección estratégica infalible una vez comenzada la batalla, una técnica a través de la cual la victoria no dependería sólo de la genialidad única del estratega comandante en jefe o de las individualidades militares, sino en la creación de una «organización inteligente» en la que prima el conjunto sobre el individuo para llevar al ejército a la victoria. Esta «organización inteligente» al estar interconectada pero con capacidad para actuar con cierta independencia, será tremendamente flexible y se podrá adaptar rápidamente a los cambios que se suceden en la batalla.

La clave para los prusianos es la estrategia, no el plan y todos los soldados, deben ser perfectamente conscientes de esta técnica y ser capaces de funcionar como «una organización inteligente». Sabido esto el líder, comandante, jefe o emprendedor, aplicado ya el ejemplo al siglo XXI debe seguir los siguientes principios:

Decidir lo que realmente importa, tener grabado a fuego que «lo importante es la estrategia, no el plan». Sabiendo cual es el objetivo a largo plazo y transmitiéndolo a toda la organización, la capacidad de ir adaptándose a las circunstancias teniendo siempre en mente ese fin general será mucho más fácil.

– Hacer fluir el mensaje por toda la organización. Siempre en forma de mensajes simples, claros y cediendo responsabilidades a los subordinados. El mensaje emitido por el superior debe decir claramente EL QUÉ QUEREMOS CONSEGUIR pero no QUÉ HACER, y POR QUÉ QUEREMOS CONSEGUIR ESO y no CÓMO HACERLO. Dada la orden, el empleado debe ir informando a sus superiores de la marcha de sus gestiones.

Dar espacio y apoyo al equipo. El objetivo general debe estar siempre en la mente del empleado, pero con libertad para decidir el mejor camino para conseguirlo.  Una libertad suficientemente amplia para que los empleados puedan ser parte activa de la estrategia de la empresa, pero también con límites, con el fin de evitar que una mala gestión de un individuo, pudiera llevar al traste todo el trabajo de la organización.

Leyendo estos consejos, no puedo más que estar de acuerdo, especialmente si lo aplicamos al mundo de la empresa. Me quedo con dos consejos que espero que me acompañen siempre: «lo importante es la estrategia, no el plan» y el directivo «no debe decir qué hacer ni cómo hacerlo, sino qué queremos conseguir y por qué».

Los antiguos prusianos, son el germen de lo que hoy es Alemania; desde luego, más de un siglo después, no podemos decir que les haya ido mal.

Un abrazo.

Emilio

PD. Fotografía cortesía de Yaisog Bonegnasher

Según Pocoyó en ninguna ciudad se vive mejor que en Madrid…

Bueno, eso piensa su papi que ha vivido en muchas! 😉

Esta frase amigo Jorge la pronunció el pasado jueves Jose María Castillejo, Presidente y Fundador de Zinkia, a la sazón, compañía creadora del célebre Pocoyó.

Si me he hecho eco de esta frase, de las muchas que realizó en su interesantísima charla del pasado jueves en el ciclo de sesiones «Top Entrepreneurs» de Madrid Emprende, fue porque pese a las múltiples incomodidades que tiene la ciudad, especialmente para los madrileños que las sufrimos, los que viajan la valoran, a los extranjeros les engancha, y aún más a los directivos o emprendedores extranjeros.

Zinkia, desde sus oficinas en el barrio de Chueca de Madrid, ha conseguido situar a su producto Pocoyó en más de 100 países, por lo cual la opinión de su presidente, me resultaba a priori de gran interés. Según dijo, Pocoyó es ya el personaje español más conocido de la historia, por encima del Quijote. Aunque es obvio que el Ingenioso Hidalgo no tuvo a su disposición la maravillosa maquinaria tecnológica que tiene el entrañable dibujo animado, sí explica el alcance que hablamos al referirnos a este pequeño personaje vestido de azul.

De lo mucho y muy interesante que comentó me quedo con varios consejos que nos regaló sobre internacionalización, innovación y emprendimiento, varios de los temas que suelo tocar cuando escribo aquí. Los enumero en este orden más o menos.

clave tener un socio internacional, aunque para eso tienes que ser conocido. A Zinkia su reconocimiento le vino de la mano de la obtención de varios premios internacionales, ahora tiene 27. Gracias a un premio conocieron a uno de los socios que hizo posible que Pocoyó fuera visto en 29 países antes que en España, todo un ejemplo de internacionalización.

apoyarse en el Icex, y sobre todo a los becarios de las Ofecomes, los cuales se implican a fondo si el proyecto les interesa. Como exbecario qué voy a decir, que tiene toda la razón!

aprovechar los canales online, en España apenas se utilizan. Antes solo se llegaba a los niños por la TV, ahora las posibilidades se multiplican en el mundo online: móvil, facebook (el famoso «pocoyízate»), youtube (23 millones de episodios vistos solo en septiembre 2010!!!!), videojuegos… y llegar también a padres y abuelos.

analiza tu mercado y sé importante donde está el negocio. En su caso EEUU. Si en EEUU se consume el 50% del mercado mundial de merchandising, allí es donde hay que estar. Y ellos lo han conseguido, estando en 4 plataformas de TV.

si ves una oportunidad de negocio ve a por ella, «he emprendido varias veces, tuve éxito en ocasiones y fracasé en otras, pero los éxitos multiplican por 5 ó por 10 el coste de los fracasos».

una pyme no tiene que cumplir objetivos, pero sí la estrategia. «En los múltiples Business Plans que he hecho, hemos cuadrado casi siempre los gastos, pero nunca los ingresos» «Los BPs te ayudan a señalar el componente diferencial respecto a los competidores».

lo más importante es el equipo. Y aquí vuelve a la carga Madrid… «Aunque en otros sitios hay más subvenciones y el alquiler sea más barato, el equipo es fundamental, y el talento está en Madrid». De hecho tienen su oficina en pleno centro y lo justifica «En Chueca (donde tienen la oficina) encuentras cualquier tipo de comida a menos de 5 mins de la oficina. En nuestro negocio, el talento es muy importante, y los trabajadores de talento necesitan espacios personales donde fomentar la creatividad, por eso tengo la oficina en el centro de Madrid en un piso con múltiples pasillos y cuartos, para ayudar a que el talento florezca. No puedo meter a los creativos en un pool enorme donde cada silla está numerada porque no me crearían nada.»

En fin, aunque estas características puede que sean similares a las de cualquier otra gran ciudad europea, si compañías líderes internacionales en animación y simulación como Next Limit o Illion Animation Studios triunfan por todo el mundo desde Madrid, algo de razón tendrá, no?

Un abrazo.

Receta para una pyme de éxito

Amigo Jorge,

Hexálogo de la empresa de éxitoAcabo de leer la nueva publicación de la Fundación MadrI+D, con la colaboración de muchas otras instituciones, acerca de las Nuevas Empresas de Base Tecnológica «NEBTs 2010». Documento muy interesante, máxime por la radiografía que hace de las pymes innovadoras que existen en Madrid, y sus características.

Siempre me pregunté si había estudios acerca de las empresas de éxito, y las características comunes que éstas tenían. Al igual que universidades, centros de investigación o escuelas de negocio de medio mundo han estudiado cómo se fabrica a un líder, las cualidades del buen directivo o la receta perfecta para fabricar a un campeón del mundo de tenis, ¿cuáles son las características propias de las pymes prósperas? Pues bien, en el «NEBTs 2010» se hacen eco de tres estudios realizados sobre este asunto: Birch (1979), Yeh-Yun Lin (1998) y Feindt et al (2002) y enumeran las cualidades propias de toda empresa de éxito:

  • Gestor propietario con un buen conocimiento del mercado y la industria.
  • Contacto cercano con clientes y un fuerte compromiso con la calidad de productos y servicios.
  • Innovación y flexibilidad en marketing en innovación.
  • Enfocadas hacia los beneficios, no hacia las ventas, con buenos sistemas de control de costes.
  • Especial atención a buenas relaciones con los empleados y la implantación de sistemas de retribución variable.
  • Operan en un mercado en crecimiento.

¿parecen fáciles de cumplir, verdad? Al fin y al cabo, son solo 6 características y bien pensadas, casi son de perogrullo. Pero dadas las estadísticas acerca de la elevada mortandas de las pymes, especialmente durante sus primeros años de existencia, se demuestra que no es tan fácil ser un emprendedor de éxito. ¿no crees que estas seis características serían un buen «hexálogo» del emprendedor? ¿hemos dado desde luego con la receta mágica del emprendedor de éxito? Sin ánimo de recordar Arguiñano, la receta desde luego me ha encantado.

Un abrazo.

PD. VaniOs SL es una de las empresas objeto del estudio! 😉

Foto cortesía de cesarmelendezolalla.

«Ni miedo, ni pereza, ni vergüenza»

Amigo Jorge,

Comienzo este post así ya que fue uno de los múltiples y valiosos consejos, quizás el mejor, que nos regaló el pasado martes en  una jornada de Top Entrepreneurs, Juan José Azcárate, Consejero Delegado de CCC o fundador de Contrapunto, entre varias empresas.

Si le dedico un post es porque su charla fue realmente ilusionante y motivadora. Quizás por lo inesperado… Acostumbrado a escuchar experiencias más «empresariales» y de «trayectoria» en estos foros, estas alegorías optimistas, positivas y retadoras («casi todo depende de ti, no culpes a nadie» no cesó de comentar) son un auténtico soplo de aire fresco en estos tiempos de zozobra económica, y de seudo depresión colectiva en el que estamos inmersos.

Te adjunto su presentación que te recomiendo leer con detenimiento y aprehenderla. Madrid Emprende, Agencia de Desarrollo Económico del Ayuntamiento de Madrid, es la organizadora de estos foros y quienes han hecho un buen resumen en su facebook.

Además de su valía como «coach», alguien que dirige una compañía líder en su sector, con más de 35.000 alumnos procedentes de casi 50 países, sin duda es un magnífico empresario e innovador director de equipos. Nos brinda estos consejos empresariales, todos cargados de sentido común y que, sin duda, todo emprendedor agradecería grabárselos  a fuego antes de lanzarse:

– Elige socios «locomotora», no «vagones».

– Pocos gastos fijos.

– Aprovecha el outsourcing.

– No te fíes del Business Plan.

– «Si no vende, no sirve.»

– «Soluciones No Problemas.»

– Aprende, informáte y conoce gente, cuanta más gente mejor, y cuanto más diferente a ti, aún mejor.

Me sirvió la charla, la verdad, espero que a ti también.

Un abrazo.

Emilio